“Hay
que tener siempre presente que aquella nación que pierde el control de la
economía, pierde su soberanía”. Juan
Perón
En
el año 2012 los legisladores del PRO votaron en contra de la nacionalización
del 51% de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF). La decisión es coherente
con la ideología de CAMBIEMOS, fuerza en la que hay lobistas de la YPF privada como
es el caso de Federico Sturzenegger, que fue Economista Jefe de la empresa entre
los años 1995 a
1998. Mauricio Macri anunció que en caso de ganar la elección presidencial el
22 de noviembre, crearía un Ministerio de Energía y pondría en su conducción a
Juan José Aranguren. Aranguren es un neoliberal declarado y actualmente está a
cargo de la empresa anglo holandesa Shell Argentina. El funcionario de la compañía
extranjera, adquirió notoriedad pública por su enfrentamiento a la política de
control de precios del Estado Nacional durante el gobierno de Néstor Kirchner. Como
respuesta al atropello a la soberanía por parte de la petrolera, el ex
presidente convocó a “no comprar más a
Shell ni una lata de aceite y que se den cuenta de que los argentinos ya no
soportamos más este tipo de acciones". Aranguren también está
involucrado en los intentos de golpe de mercado y de devaluación del año 2014[1].
Macri,
Sturzenegger o Aranguren proponen retrotraer la política energética a la época
de la gestión privada extranjera anterior al año 2012. La decisión de nombrar a
un representante de Shell, agravará aún más el problema energético actual que
es el resultante de aplicar políticas neoliberales depredatorias y atentatorias
de los intereses nacionales.
En
nuestra opinión y a diferencia del punto de vista los intelectuales y políticos
representantes de empresas trasnacionales de CAMBIEMOS, consideramos que la
nacionalización de YPF del año 2012 es un primer paso sumamente positivo para
la soberanía nacional.
La YPF nacionalizada es
parte de la Nueva
Argentina
“Es
menester acelerar la marcha hacia el Junín y Ayacucho económicos, terminando
así el ciclo que se inició en Buenos Aires el 1 de agosto de 1929 (nuevo San
Lorenzo) en que YPF rompe los trust, tomando la dirección y el contralor del
mercado del combustible liquido en Argentina”. Enrique
Mosconi
La
ley 26.741/12 declaró de “Interés Público
Nacional el logro del autoabastecimiento de hidrocarburos” y estableció de
“Utilidad Pública y sujeto a expropiación
el 51% del patrimonio de YPF S.A. y Repsol YPF Gas S.A”. Según datos del
Ministerio de Economía, la expropiación de YPF se realizó con una emisión de
bonos con un valor nominal de 5.000 millones de dólares (Bonar X US$ 500
millones; Discount 33 US$ 1.250; Bonar 2024 US$ 3.250) (Ministerio de Economía
2014: 4).
La
recuperación estatal de la mayoría accionaria de la empresa energética, implica
la refundación política y económica del país. A partir de ahora, la dirigencia
argentina ocupa un nuevo rol en el mundo
y se integra a otras naciones que aplican un control estatal estratégico de los
hidrocarburos, como son los casos de Brasil (Petrobras), Rusia (Rosneft y Gazpron),
Bolivia (YPFB), China (CNPC y SINOPEC) o Venezuela (PDVSA).
El control estatal de los
hidrocarburos hace a la independencia económica de los países y forma parte de
la seguridad nacional. Enrique Mosconi fue claro y
conciso a la hora de fundar YPF en el año 1922 y postuló que el país que no
administra su petróleo se encuentra en “una
situación de peligro (…) dependiendo del extranjero para su aprovisionamiento
en época de paz como de guerra, declaraba un estado de manifiesta inferioridad”.
Las palabras del fundador de YPF adquieren suma actualidad y solamente es
cuestión de analizar el origen de las guerras que protagoniza EUA en Libia,
Afganistán, Irak y en el conjunto de Medio Oriente.
Con
la ley 26.741/12 el país expropió a una empresa imperialista y recuperó parte
de la soberanía entregada al extranjero y a los grupos económicos locales. Es
bueno resaltar, que YPF nació con financiamiento estatal en el año 1922 y que recién
luego de décadas fue privatizada. La construcción originaria retomó la
estructura de la Dirección General de Explotación de Petróleo de Comodoro
Rivadavia, que fue creada en 1910. Este mismo año, se sancionó la primera
ley de reservas. Entre los miembros de la flamante Dirección ,
estaban los ingenieros Luis Huergo y Enrique Hermitte.
YPF estatal y la soberanía nacional
“Una nación que acepta la teoría librecambista
de otra no es una nación, pues está favoreciendo, al desguarnecer su propio
mercado, a la industria extranjera, y en consecuencia, frenando su propio
desarrollo industrial, base de toda independencia nacional.” Juan José Hernández Arregui
YPF
produce y comercializa el 55% de las naftas del país, dejando muy por detrás a
Shell, Esso, Petrobras u Oil. La empresa participa del 28% del mercado de gas (Di
Dicco 2014).
Como
resultado de la explotación neoliberal, YPF estaba perdiendo reservas y
aumentaba la importación de hidrocarburos para abastecer el mercado interno y la industria. Entre los
años 2003 a
2011 durante la gestión privada de REPSOL, la producción anual de hidrocarburos
de la empresa disminuyó un 44%. Por el contrario, desde el año 2012 la
producción aumentó un 6%. En tiempos de gestión privada, la producción de
gas disminuyó un 37% en menos de una década (2003/11). Ya recuperada por el
Estado, se detuvo la caída y se inició un crecimiento paulatino (Ministerio de
Economía 2014).
La
recuperación de YPF por parte del Estado favorece la soberanía nacional, al
menos, en los siguientes aspectos:
a- Mejora
la competitividad de la producción.
“La
forma más característica de la agresión exterior en América Latina ha sido la
agresión económica.” Enrique
Gugliarmelli
YPF regula los precios de
combustibles y sus derivados en la Republica Argentina.
Sin energía a bajo costo, la economía nacional perderá
competitividad. Se debe tener en cuenta que la
industria consume el 26, 8% de la energía de fuentes secundarias (electricidad,
gas, motonaftas, diesel, etc.-), el transporte lo hace en un 30,7% y el universo residencial un
27,2%. La distribución del gas por redes
fue en un 44,1% residencial, un 35,8% industrial y por debajo le siguió con un
12,2 % el transporte y con el 7,9% el comercial / publico. Los combustibles
diesel / gas oil son utilizados casi en su totalidad, en la producción
agropecuaria (32,1%) y en el transporte (66,3%) (De Dicco 2015: 8 - 10).
En un mercado oligopólico es
fundamental la tarea de la YPF estatal, que tiene que fijar un precio de
referencia. Es importante tener en cuenta, que la extracción
del 75,2 % del petróleo se concentra solamente en cinco empresas que son YPF
(37,8%), Pan American, SINOPEC, Plaspetrol y Petrobras. En el mercado de gas
ocurre algo similar y cuatro empresas manejan el 74% de la extracción (Total
Austral, YPF -25,3%-, PAE y Petrobras).
YPF
tiene tres refinerías (La Plata, Luján de Cuyo y Plaza Huincul) que implican el
51,2% de la capacidad instalada. Hay otras cuatro importantes que son Campo
Duran en Salta creada por YPF en 1962, hoy administrada por PETROBRAS; San
Lorenzo en Santa Fe fue construida por YPF en 1938 y hoy la opera la empresa de
Cristóbal López (Oil combustibles); la refinería de Bahía Blanca tiene origen en
el año 1926 con capital privado y actualmente la opera PETROBRAS ;
Campana surgió con capital extranjero norteamericano en 1911 y hoy es la firma AXION Energy
controlada por Bridas y por Capital Chino; la destilería de Dock Sud la
construyó en 1931 y hoy la administra la empresa Shell. La YPF estatal edificó la principal
infraestructura de procesamiento de petróleo existente y desde su
privatización en 1992 a
la fecha, no se construyeron nuevas plantas (De Dicco 2014: 19, 31- 33).
YPF va a intervenir en la
fijación de precios de los combustibles, del gas del consumo diario de las
familias, del costo del trasporte o de la electricidad. La generación de ésta última fuente de energía es en 60,9% térmica,
seguida de la hidroeléctrica (35,3%), nuclear (3,2%) Eólica y Solar (0,5%) (De
Dicco 2014: 67).
YPF participa
de la industria petroquímica[2]
y abastece a la producción, mediando en la formación de los valores de plásticos,
pinturas, asfaltos, etc.
De la tarea de YPF dependen
los salarios de los trabajadores y su capacidad de compra y la competitividad global
de la producción argentina.
b- Contribuye
a la solvencia financiera.
“La presión económica aunque
incruenta, ciñe más que la bélica”. Manuel Savio
El
aumento de los niveles de producción, le permite al país reducir la salida de
divisas resultantes de la importación de gas y de combustibles. Las
administraciones privadas se centraron en el negocio de la exportación de gas y
no en la sustentabilidad energética a largo plazo. En los años noventa mandaban
nuestro recurso al extranjero, poniendo en riesgo el abastecimiento de la Argentina. Resultado
de estas desacertadas políticas, solamente entre 2010 y 2013 le originaron al
país una salida de 14.365.709.073 millones de dólares en concepto de las importaciones
que hace ENARSA de Bolivia (5.882 millones de gas y 8.483 de Gas Natural Licuado)
(De Dicco 2014: 24).
No
fue la primera oportunidad en la historia en la cual desaprovechamos nuestros
hidrocarburos y ya en el año 1936 Enrique Mosconi sostuvo que “nuestro país, que poseía ricos yacimientos
en la Patagonia, importaba el combustible líquido necesario para su vida, su
defensa y su seguridad”.
En el contexto actual de escases
de divisas, el autoabastecimiento energético que impulsa YPF es una causa
nacional.
c- Sustentabilidad energética.
“En
materia de combustibles el objetivo fundamental de la Nación será lograr el autoabastecimiento
del país”.
Segundo Plan Quinquenal, año 1952
Una
de las cuestiones que aceleró la expropiación de YPF fue la falta de
inversiones y la distribución onerosa de las regalías que hacía la compañía. El
manejo antinacional de REPSOL y de otras empresas del ramo, dejó como saldo al
año 2011 un horizonte de reservas de petróleo de 10,3 años y de 6,6 años para
el gas[3].
Previo a la expropiación de 2012, Argentina
iba camino a agotar sus reservas de hidrocarburos y a aumentar su importación.
Las
empresas privadas chantajeaban a los argentinos y cuando querían subir los
precios u obtener algún beneficio sectorial, desabastecían las estaciones de
servicio. Desde la expropiación y tema no casual, ya no hay inconvenientes de
provisión en las 1500 surtidoras que tiene YPF.
La recuperación de la
empresa por el Estado está permitiendo reinvertir las regalías en exploración,
perforación y ampliación de equipos y de la infraestructura de YPF.
Hoy la empresa tiene un Plan Estratégico asentado en tres ejes:
I- Cuencas
Productivas: en el corto plazo se propone aumentar el rendimiento de las
cuencas Neuquina y del Golfo San Jorge;
II- Explotación
de hidrocarburos no Convencionales: YPF está avanzando en los proyectos de Vaca
Muerta (Cuenca Neuquina) y en la formación D-129 (Golfo San Jorge). Según
información oficial de la empresa, “se
analizan potenciales recursos en las Cuencas Noroeste, Cuyana, Austral, y en la
Chaco-Paraná”.
Argentina
es la segunda productora de Shale oil, después de China. Este tipo de recurso
presenta la particularidad de que “no
tiene la suficiente permeabilidad para que el petróleo y el gas puedan ser
extraídos con los métodos convencionales, lo cual hace necesario la aplicación
de nuevas tecnologías” (Datos oficiales de YPF).
III- Búsqueda
de Nuevas Cuencas.
Por
primera vez luego de su privatización, YPF
tiene una planificación nacional estratégica y está ampliando las reservas de
hidrocarburos generando condiciones para la sustentabilidad energética en el
mediano plazo. Tomando distancia de la lógica meramente rentista y
cortoplacista, la nueva YPF
hace hincapié en la explotación hidrocarburifica sustentable en términos
medioambientales.
La función social de YPF
“El
aumento de producción de combustibles, tendiente a lograr la expansión de los
servicios públicos y la promoción económica general, estará destinado,
primordialmente, al mejoramiento del nivel de vida y bienestar de la población”. Segundo Plan Quinquenal, año 1952
Hasta
el momento de la privatización, YPF era una empresa importante en términos de
fomento social del desarrollo de diversas localidades argentinas. La empresa
era una fuente de empleo, en paralelo a que construía infraestructura, barrios
y conjuntamente al Sindicato Unidos de Petroleros, brindaba asistencia social a
las familias.
Con
la privatización y destrucción de la compañía petrolera, diversas localidades
perdieron su fuente de ingreso conduciendo a la pobreza y el abandono a miles
de familias. Lo que fueran prósperos
polos de desarrollo, en los años noventa, protagonizaron las puebladas contra
el desempleo y el hambre de Cutral Co y Plaza Huincul (Neuquén) y Tartagal y
Mosconi (Salta).
Un
artículo de Leticia Muñiz Terra sostiene que luego de la privatización de YPF “se produjo la desvinculación de 31.356
trabajadores, es decir un 84,6% de su dotación de personal (…) en la Refinería La Plata
la plantilla de trabajadores se vio reducida en un 89%, pues pasó de estar
conformada en 1991 por 5.400 empleados a 600 en el año 1994” (Muñiz Terra 2014).
A
partir del año 2012 YPF está ampliando su producción, cuestión que permite
crear nuevos empleos directos y de proveedores locales que sustituyen
importaciones.
Entre
sus actividades, la empresa emitió bonos por más de 2.000 millones de dólares,
ofreciendo ámbitos de inversión para mediados ahorristas que con ello,
financian el progreso del país.
Integración Nacional
“La
distribución de combustibles tenderá a activar el desarrollo de las economías
regionales promoviendo en ellas la radicación de industrias”. Segundo Plan
Quinquenal, año 1952
El
neoliberalismo se propuso debilitar el Estado Nacional. Entre los mecanismos
utilizados se encuentran las privatizaciones de empresas estratégicas y la
descentralización de funciones a las provincias. El aparato del Estado nacional
fue destruido o malvendido y transferido a grupos económicos oligopólicos y
trasnacionales. La nación delegó funciones educativas, de salud, de infraestructura
y de manejo de los recursos naturales.
La
Constitución de 1994 estableció que “Corresponde
a las provincias el dominio originario de los recursos naturales existentes en
su territorio”. Esta cláusula favoreció el debilitamiento del Estado, que
perdió capacidad de regulación en relación a las empresas multinacionales. La
sanción de la ley 26.741/12 y la expropiación del 51% de YPF, son un paso
importante para recuperar poder nacional diluido en las provincias y enajenado
en manos extranjeras.
Es interesante
destacar, que el 83% de la extracción de petróleo del año 2013 proviene solamente
de cuatro provincias que son Chubut (27,8%), Santa Cruz (21,9%), Neuquén
(19,6%) y Mendoza (14,1%). En la extracción gasífera se produce un fenómeno
similar y el 94,8% del extraído en la Argentina provino de Neuquén (43,3%), del
Estado Nacional (11,9%), de Santa Cruz (9,4%), de Tierra del Fuego (8,4%), de Chubut
(8,1%), de Salta (7,8%) y de Mendoza (5,9%) (De Dicco 2014: 18). La YPF nacionalizada está subsidiando la
energía y el desarrollo sustentable de todas las regiones.
La ley
26.741/12 creó un Consejo Federal de
Hidrocarburos con participación de todas las provincias. No hay posibilidad
de federalismo sin un Estado Nacional fuerte y viceversa. La participación de
las provincias mancomunadas, le otorgan poder y solvencia a YPF frente a las corporaciones
extranjeras, en paralelo a que se distribuyen los resultados de la empresa
entre todos los argentinos.
YPF
está integrando energéticamente a la región con obras como el Gasoducto Juana Azurduy que une Argentina
y Bolivia. A partir de ésta obra, se está construyendo el Gasoducto Noreste que llevará energía a las provincias de Formosa,
Chaco, Santa Fe, Salta, Corrientes y Misiones[4].
Estas iniciativas se inscriben en el Plan
Energético Nacional 2004 – 2019 del MINPLAN, que ya inició 23 obras de
gasoductos con 1000 Km
de cañería y que alcanzará a dos millones de hogares. Actualmente y como
resultado de este Plan, en el periodo 2004 a 2013 un 33% más de argentinos tienen
redes de gas (De Dicco 2014: 45-47).
Función científica
La
fundación de YPF en el año 1922, conllevó la apertura de nuevos ámbitos de
formación científica. Enrique Mosconi destacó que debido a la creación de YPF,
en 1926 el Poder Ejecutivo aprobó la Escuela Industrial de La Nación y en el año 1928 se abrió Instituto del Petróleo en la UBA. El Rector de
la universidad era Ricardo Rojas que sostuvo que “La cuestión de petróleo es también una cuestión de educación técnica
superior y especializada, aspecto del problema que no debe descuidarse si
queremos asegurarnos el éxito” (Mosconi 1983: 102-104)
La
ampliación de YPF iniciada en 2012, demanda recursos humanos altamente
calificados y es por ello que el CONICET y la empresa de energía están
solventando proyectos de capacitación específicos para el área. La Fundación
YPF financia becas de grado y de posgrado, Centros
Culturales y otras instituciones abocadas a la ciencia, la cultura y la tecnología. Resultado
del renacer de la actividad, la Universidad Nacional
Arturo Jauretche con apoyo de YPF, abrió la carrera de
Ingeniería del Petróleo.
Con la YPF nuevamente estatal
recuperamos soberanía y dimos un paso firme hacia la conformación de la Nueva
Argentina. Juan Perón explicó con claridad la
centralidad que adquiere el control nacional nuestros recursos económicos y
sostuvo que “ningún país es
verdaderamente libre si no ejerce plenamente el poder de decisión sobre la
explotación, uso y comercialización de sus recursos y sobre el empleo de sus
factores productivos (…) el progreso económico dependerá exclusivamente de nuestro
propio esfuerzo; de allí que el capital extranjero deba tomarse como un
complemento y no como un factor determinante e irremplazable del desarrollo”:
Bibliografía
citada
-
Bernal
Federico (2015) Energía para el
desarrollo y la inclusión social, Planeta, Buenos Aires.
-
De Dicco
Ricardo (2014)
Indicadores Energéticos de Argentina,
OETEC. En línea http://www.oetec.org/nota.php?id=197&area=1
(última consulta noviembre 2015).
-
Ministerio de
Economía de La Nación (2014) Nota
técnica Nº 79, En línea. http://www.economia.gob.ar/peconomica/informe/notas_tecnicas/nota_tecnica79.pdf
(última consulta noviembre 2015).
-
Muñiz Terra
Leticia (2014)
La privatización de YPF y la encrucijada
laboral de sus ex-trabajadores. En línea http://www.oetec.org/nota.php?id=172&area=1(última
consulta noviembre 2015).
Portales
www.economia.gob.ar
[1] Shell,
Aranguren y el golpe de Mercado.
http://tiempo.infonews.com/nota/3108/piden-investigar-a-shell-y-a-siete-bancos-por-una-corrida-cambiaria
[2] “YPF es el principal productor de
petroquímicos de la
Argentina. Cuenta con tres plantas: Ensenada, Plaza Huincul y
Bahía Blanca (50% Profertil), que elaboran benceno, tolueno, xilenos mezcla,
ortoxileno, ciclohexano, solventes, MTBE, buteno 1, oxoalcoholes, TAME, LAB,
LAS, poliisobutileno, anhídrido maleico, metanol y urea. YPF Química
comercializa sus productos en el mercado local, donde es líder, y en el mercado
exterior, con destinos como Estados Unidos, Europa, Mercosur y resto de
Latinoamérica”. En línea.
https://www.ypf.com/LaCompania/Paginas/downstream.html?C=ypf-y-la-industria
[3] Las reservas
comprobadas se encuentran en las Cuencas Productivas del Noroeste, Cuyana,
Neuquina, Golfo San Jorge y Austral.
[4] Gasoducto del
Noreste.
http://www.minplan.gob.ar/noticia/19192/comenzo-la-construccion-del-gasoducto-del-noreste.html
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