La actitud
del gobierno porteño, reactualiza los postulados históricos que implementó la
derecha liberal argentina. Cuando decimos “actitud” queremos resaltar dos
cuestiones:
-
El
ACCIONAR VIOLENTO y desmesurado de la Policía Metropolitana.
-
La JUSTIFICACIÓN DEL HECHO VIOLENTO que realizó
el gobierno de la Ciudad.
La derecha y el conflicto social
Luego de producidos los hechos, Macri dio una
conferencia de prensa y justificó la represión. Su discurso se orientó a
persuadir a su electorado, de que la Policía Metropolitana
cumplió el mandato de la mano dura
que caracteriza a la derecha liberal. La policía actuó respetando el mandato de
dicha ideología que:
·
Considera
de manera negativa la intervención del Estado en las carteras sociales. En
particular, se opone a aquellas instituciones cuya finalidad es mejorar las
condiciones de los grupos sociales y culturales más débiles y desfavorecidos.
·
Entiende
que el conflicto político es “antisocial” y pernicioso para el sistema de poder
establecido.
·
Promueve
la aplicación de la fuerza, sobre la potencial concertación y negociación democrática,
para resolver los conflictos.
·
Organiza
cuerpos institucionales conducentes a ejecutar excesos, violando códigos y
leyes procesales.
La Ciudad de Buenos Aires está
tranquila, se reprime “solamente” a los “grupos más débiles”
“Hombres
que generosamente no quieren consentir que la lucha por la existencia acarree á
algunas personas los males que son consecuencia lógica de su incapacidad y mala
conducta, son bastante crueles para amargar más la vida de otras personas,
infligiéndoles tanto á ellos como á otras familias males artificiales”. Herbert Spencer
Este hecho, debería haber formado parte de
una autocrítica en la conferencia de prensa que dio Macri. Por el contrario, ni
se lo mencionó. Posiblemente, el Jefe de Gobierno comparta la opinión de
Herbert Spencer de que no corresponde al Estado desarrollar políticas sociales
sobre los grupos más débiles, ya que eso sería contrariar la “lucha por la existencia”.
Pareciera, que no hay que inquietar a su electorado de clase alta,
con temas propios de los pobres que van al hospital público. Incluso, podemos
suponer que Macri comparte la preocupación de Spencer que se oponía a la intervención
del Estado, ya que ¿no es cruel aumentar
el dolor de la mejor parte de la humanidad para ahorrar penas á la parte que
menos auxilio merece?.
En definitiva, para el liberalismo los grupos vulnerables no tienen derechos ya que no
pueden pagarlos. Tal es así, que el cierre de un taller de un hospital, el
mal estado de su infraestructura o la brutal represión sobre su personal, no
son cuestiones consideradas “prioritarias” para la dirigencia de la Ciudad de
Buenos Aires. Lo más terrible, es que da la sensación de que el electorado de
Macri, a quién le dirigió la conferencia de prensa, tampoco se desvela por el
asunto.
La Ciudad sin conflictos es PRO
“La
pobreza de los incapaces, la angustia de los imprudentes, la miseria de los
holgazanes, ese soterramiento de los débiles por los fuertes obedece á los
decretos de una benevolencia inmensa y previsora”. Herbert Spencer
Pese a los reclamos de los miembros del
hospital Borda, de la comunidad y de la dirigencia política y sindical, el
gobierno respondió con una inusitada violencia. Frente a un reclamo por más
parcial que sea, la derecha reacciona buscando suprimir cualquier iniciativa de
cambio. Para “resolver” un problema, la
derecha directamente lo intenta suprimir violentamente.
A lo largo de la historia, estas corrientes
políticas promovieron la conformación de
instituciones policiales que operaron fuera de la ley. No es la primera oportunidad en la cual las fuerzas de
seguridad reprimen violentamente a la sociedad civil. Solamente por citar
algunas situaciones, se debe recordar la tarea del coronel Ramón Falcón que reprimió
manifestaciones y asesinó a dirigentes políticos anarquistas. Otra situación,
fue la del Jefe de Policía relevado Antonio Navarro, que durante la tercera
presidencia de Perón, se movilizó y derribó al gobernador de Córdoba Ricardo Obregón
Cano. Más recientemente, se debería
recordar que Alfredo Fanchiotti asesinó a Maximiliano
Kosteki y a Darío Santillán, a plena luz del día.
La Policía Metropolitana reitera un
comportamiento típico del liberalismo
argentino, que intenta suprimir los conflictos surgidos en el seno de la democracia,
por intermedio del accionar de la represión y de la violencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario